domingo, 28 de marzo de 2010

La Lucha contra Caragón V

IV. El Verdadero Caragón

El niño de fuego deja fluir su poder, su cuerpo se agita, su melena castiga el poco aire, sus manos dejan de golpear a Mortimer, y empuñadas entran en una pose de concentración tan grande.
El niño crea un aura de fuego expansiva gigantesca, al mezclarse con los gases del castillo y las máquinas, la ola de fuego demoledor arrasa mientras busca escapar por todas las salidas existentes.

Cientos de DeRabrazos gritan desesperados cuando son consumidos por las llamas, el calor es tan alto que la roca se funde.
El grupo en el salón y el mismísimo Caragón sienten la explosión y como el templo comienza a colapsar, una roca enorme, se desprende del cielo del salón, y empieza a caer sobre Janis, cientos de estalactitas no permiten que ningún lugar sea seguro.

El tiempo para Caragón se detiene

Un joven Cáscator de Nut, se acerca a un jovial y despreocupado joven.
- Amigo mío hoy deciden mi futuro.
-Y de que te preocupas, he hablado muy bien de ti, y pajarote también – responde el joven, mientras que, otrora joven, Ikel se acerca.
-No debes temer – agrega Ikel – serás elemental, imagínate no rechazaron a alguien tan inútil y soñador como Caragón, y no te van a elegir a ti, que defendiste y estuviste en el conflicto final de la zona Azul.

El androide ríe, Caragón asiente sonriendo pero frunce el ceño.
-así que soy un inútil? – dice irónicamente el otro joven Caragón – al menos no me preocupo al comer huevos al desayuno por cometer canibalismo– el trío de amigos ríe.
De pronto unos guardias llegan corriendo.
-Señores!! el demonio que contaminaba a las mujeres ha sido rodeado, pero nos es imposible contenerlo.
Caragón saca su espadín – guíanos muchacho.

Llegan los tres corriendo frente al demonio, frente a Rabrazo.

Este babea sangre, los tentáculos de su espalda se mueven como serpientes. Ya lo rodean varios guardias muertos.

Los tres se arrojan a luchar, la pelea es muy pareja, de pronto el demonio aprovecha un descuido de Ikel, y se abalanza sobre él para dañarlo, Caragón se apresura, logra correr a su amigo tirándolo al suelo, y atraviesa la garganta de Rabrazo con su espada, el demonio se agita, y colapsa, todos vitorean, los tres amigos se miran sonriendo, pero la expresión cambia, cuando cientos de tentáculos salen desde el cuerpo de Rabrazo y muerden en todas partes a Caragón. Ikel no logra cortar a tiempo todos los apéndices. Caragón se desvanece, cae y solo escucha, ¡¡llevémoslo a palacio!!, ¡¡avisen a los curanderos!!
“¿Qué les pasa? estoy bien!!, ¿Por qué no me escuchan?, ¿Qué pasa?, QUE PASA!!!”

Días después, apenas Caragón abre los ojos, se escucha una voz.
-ha despertado – Caragón mira a un Ikel sonriente – ya sabíamos que al bueno de Caragón no lo perderíamos.
-Mis manos por que están así – Caragón las mira muy triste – estas garras negras y estas deformaciones… ¿cuando empezaron?
-Amigo no te preocupes por eso- le dice tranquilamente ikel.
-¿Cuándo empezaron? – pregunta Caragón con un dejo de impaciencia.
- Será mejor que descanses- le responde nuevamente ikel.
-¡¡¡ ¿CUANDO EMPEZARON?!!!- le grita en un gruñido.
-apenas te hirieron – dice Cascator – hace unas tres semanas.
- Tres semanas? – y al tratar de voltearse, se da cuenta que su cuerpo completo está extraño.
Al mirarse en el espejo, se ve convertido en una bestia, sus rasgos se han perdido.
-cálmate Caragón, encontraremos la cura.
Se escucha una gran explosión en las afueras, los soldados tratan de detener.
-son Derabrazos!! ¡¡Cientos de ellos!! – grita Ikel.
- Cascanueces a las armas!!! – grita Cáscator de Nut.

Imposibles de contener, los DeRabrazos arrasan con todo, hasta llegar a la habitación de Caragón.
Entran tres DeRabrazos, Mudjo, el padre de Mudo, y dos más.
-“hemos venido por ti mi gran señor” – dice mentalmente Mudjo.
-¡NO ME TOQUEN O LOS MATARÉ! – grita Caragón
-“solo nosotros podemos ayudarte” - dice Mudjo.
-Y por qué quieren ayudarme?!!!
-“porque te llevaste la esencia de nuestro padre” responde el DeRabrazo “eres el nuevo señor de los DeRabrazos”

“... y me entregué, me dejé llevar... me convencí... quizás el antiguo Caragón no murió... no desapareció como yo creía...”

….

-¡Janis tenemos que salir de aquí! – grita Shuark que lleva a Campanero.

Janis mira a Caragón, y se sorprende, por las mejillas de Caragón se deslizan unas lágrimas.
-Como pude dañar así a mi planeta – se dice a sí mismo.
-Caragón debemos salir de aquí – dice apresurado Janis.
Caragón levanta la cabeza y mira todo como si recién despertase, una gran roca se desliza hacia la entrada, “si cae nos sepultará a todos”
-Debajo de mi payasos!!!- grita Caragón.
Su voz se escucha distinta, clara y cantarina.

Todo el grupo corre abajo y se protegen de los escombros que caen.
La roca se desliza más rápido. Caragón salta, y la roca lo impacta en la nuca, el golpe retumba, y estremece todo, el grupo completo queda mirándolo asombradamente.
-rápido...no podré soportarla por mucho...¡que esperan!
El grupo sale corriendo. Janis al estar a salvo, se gira.
-Vamos te sacaremos – le dice.
-No, es imposible… tenías razón... he perdido – le dice Caragón sonriendo.

Janis se asombra la cara de Caragón cambia a la de un joven de ojos sinceros, la roca termina por ceder y le aplasta. La magia que lo acompañaba se desvanece y los huesos que armaban su cuerpo se sueltan creando una marejada de calaveras, cráneos y quijadas.
Janis le toca la cara y le dice.
-En nombre del rey te doy las gracias, Caragón, elemental de las rocosas.

Sin perder más tiempo el grupo sale corriendo, se les une el niño de fuego e incluso algunos DeRabrazos.

Todos terminan afuera y miran el templo venirse abajo y estallar ruidosamente.
El grupo mira a los DeRabrazos, estos devuelven la mirada.

Uno de los DeRabrazos, se acerca a Janis y baja la cabeza en señal de respeto.
Janis devuelve el gesto y los DeRabrazos se dan la media vuelta y sin cruzar palabra, empiezan a internarse en el pantano, se escuchan algunas frases en lablano.
-¿Qué dicen? – pregunta Janis.
Campanero con un hilo de voz, responde.
-”volvamos a casa” - eso dicen.

Anakoli mira para todos lados.
-descansaremos aquí – y empieza a atender a Campanero.

Janis se para y mira la oscuridad, un camino empieza a surgir, marcado con antorchas.
-Dududam,...padre,.... pronto – dice mirando el camino a lo lejos